La Dirección General de Tráfico (DGT) ha revelado datos preocupantes tras su última campaña de vigilancia y control en zonas de obras en carreteras interurbanas, llevada a cabo entre el 23 y el 29 de junio. Solo un 10% de los conductores respetó la velocidad específica en estos tramos, una cifra alarmante que pone en evidencia el bajo nivel de cumplimiento de las normas de circulación en situaciones de especial riesgo.
Durante los siete días que duró la campaña, agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil controlaron un total de 240.170 vehículos, de los cuales 14.964 fueron denunciados por diferentes infracciones. El exceso de velocidad fue, con diferencia, la causa más común, con 14.058 denuncias, lo que representa el 86% de las infracciones detectadas.
Además, se formularon 462 denuncias por no respetar la señalización en las zonas de obras, ya fueran indicaciones de los agentes de tráfico, de los operarios, o de señales verticales, marcas viales, conos, balizas luminosas o semáforos.
Más de 14.000 denuncias por exceso de velocidad en una semana de controles intensivos en carreteras interurbanas
Otras conductas sancionadas incluyen 114 adelantamientos antirreglamentarios, 32 casos de no respetar la distancia de seguridad, 22 por cambios de carril indebidos y 20 por conducción negligente.
También se detectaron infracciones relacionadas con el uso de dispositivos de seguridad y la conducción bajo los efectos de sustancias: 174 conductores fueron denunciados por usar el teléfono móvil, 175 por no llevar cinturón de seguridad o casco, 63 por conducir bajo los efectos del alcohol, y 50 por presencia de drogas en el organismo.
Un problema de seguridad real
Según los datos provisionales del Registro Nacional de Víctimas de Accidentes de Tráfico, en 2024 se han registrado ya 142 siniestros relacionados con trabajos de mantenimiento y conservación en carretera. De estos, 23 implicaron a operarios que caminaban por la calzada o sus inmediaciones, y los 119 restantes a trabajadores dentro de sus vehículos.
La campaña se enmarca dentro del calendario anual de la DGT y pone el foco en un tema especialmente sensible: la seguridad tanto de los usuarios de las vías como de los operarios que trabajan en ellas. Por ello, se vigiló con especial atención toda obra que afectara la calzada o modificara el trazado habitual, incluyendo tramos en túneles.
Con estos datos, la DGT hace un nuevo llamado a la prudencia, el respeto por las normas y la responsabilidad al volante, especialmente en zonas donde el riesgo es mayor por la presencia de trabajadores y alteraciones del trazado habitual.