Las salidas de vía se han convertido en el tipo de siniestro más mortal en las carreteras españolas y, sin embargo, en uno de los menos visibles. Solo en 2023, 539 personas perdieron la vida y 1.674 resultaron heridas graves en este tipo de accidentes, lo que representa el 40,2 % de todas las muertes en vías interurbanas.
Así lo recoge el estudio “El grave problema de los siniestros de tráfico por salida de vía en España. La prevención mediante los Sistemas de Transporte Inteligente (ITS)”, elaborado por el Instituto Universitario de Tráfico y Seguridad Vial (INTRAS) de la Universitat de València, con la colaboración de la empresa Metalesa Seguridad Vial.
Entre 2017 y 2023, las salidas de vía provocaron más de 80.000 siniestros con víctimas, que se saldaron con 3.400 fallecidos y más de 10.000 heridos graves, según los datos de la base ARENA de la Dirección General de Tráfico (DGT). Si no se adoptan medidas urgentes, los investigadores prevén que este tipo de accidentes representen el 43 % de los siniestros graves y mortales en 2030.
Carreteras convencionales y vehículos envejecidos: el cóctel de riesgo
El informe revela que seis de cada diez salidas de vía ocurren en carreteras convencionales, las más vulnerables del país. En el 80 % de los casos, la velocidad inadecuada o excesiva está presente como causa principal, a menudo combinada con distracción, fatiga o condiciones adversas.
Además, dos de cada tres vehículos implicados tienen más de 10 años, lo que incrementa la gravedad de los siniestros. El 53,6 % son turismos y el 30 % motocicletas.
El catedrático Luis Montoro, presidente de honor de la Fundación Española para la Seguridad Vial (FESVIAL), advierte que “la velocidad inadecuada no es solo superar un límite. Basta un error de cálculo o un segundo de distracción para que, en una carretera convencional, el resultado sea mortal”.
Un drama silencioso para la seguridad vial
Montoro califica las salidas de vía como “uno de los grandes dramas ocultos de la seguridad vial en España”. Según sus estimaciones, unas 16.000 personas han fallecido desde el año 2000 por este motivo y más de 450.000 han resultado heridas. “Es una pandemia silenciosa en nuestras carreteras, que podríamos reducir con mejor formación y con infraestructuras más inteligentes”, afirma.
Los sistemas inteligentes de transporte, una solución eficaz
El estudio del INTRAS aporta una conclusión esperanzadora: los Sistemas Inteligentes de Transporte (ITS) podrían evitar hasta el 60 % de los siniestros graves y mortales por salida de vía. Estos sistemas permiten detectar riesgos en tiempo real, gestionar la velocidad de forma dinámica, alertar sobre meteorología adversa y comunicar incidencias directamente a los conductores.
“El coste de no aplicar esta tecnología ya no es económico, es humano”, subraya José Ignacio Lijarcio, coordinador del estudio. “Los ITS no sustituyen al conductor, lo acompañan. Le informan, le anticipan el peligro y adaptan la vía a las condiciones del momento”.
Llamamiento a la acción y cooperación institucional
Durante la presentación del estudio, celebrada en Madrid, participaron expertos de la Asociación Española de la Carretera (AEC) y de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, que coincidieron en la necesidad de reforzar la cooperación entre instituciones, empresas e investigadores.
El teniente coronel Jaime Gómez Granado destacó que “las salidas de vía constituyen una gran preocupación. En carreteras convencionales se concentran muchos de estos siniestros, especialmente entre motoristas y furgonetas. La llegada de los ITS es una buena noticia: invertir en tecnología vial es invertir en vidas”.
Por su parte, Elena de la Peña, subdirectora general técnica de la AEC, reclamó “democratizar el uso de los ITS” en carreteras secundarias y locales, donde la siniestralidad es más alta y la inversión más limitada.
Recomendaciones clave del informe
El estudio propone medidas urgentes para frenar esta tendencia:
- Priorizar la instalación de ITS en tramos de alta siniestralidad.
- Implementar gestión dinámica de velocidad y señalización adaptativa.
- Reforzar controles de velocidad y distracción y promover la renovación del parque móvil.
- Fomentar la colaboración público-privada en proyectos tecnológicos.
- Impulsar la investigación continua sobre causas y prevención de siniestros.
“La salida de vía no puede seguir siendo un punto ciego”
En la clausura, Montoro recordó que “las vidas no se salvan solo con leyes o campañas, sino con una infraestructura que piensa y una sociedad que no tolera el conformismo. La salida de vía no puede seguir siendo un punto ciego en la política de seguridad vial”.
El informe se alinea con los objetivos de la Estrategia Española de Seguridad Vial 2030, que busca reducir a la mitad las muertes y los heridos graves en carretera. Su mensaje es claro: la tecnología, la formación y la prevención pueden salvar miles de vidas si se aplican a tiempo.
En este enlace puedes descargar el estudio completo y en este se puede descargar el resumen ejecutivo.